ELLAS...LAS PALABRAS.

Las palabras, como lanzas frias, arteras,
se clavan en el corazón indefenso;
éste,atina a reaccionar,pero el rigor
de esas palabras, aún más lo lastiman...
afiladas palabras ,muchas veces,sin fundamento,
hieren a destajo ,cortan y mellan
sin importar nada.
Las palabras suelen ser ,en ocasiones
como bombones dulces que halagan oídos
ávidos de esperas por ellas.
Otras veces, se transforman
en certeros dardos sanguinarios
que no dan opción para escapárseles y dan
en el blanco indicado y buscado.
Ay, las palabras...las palabras...
algunas como soeces escupitajos al alma;
otras ,como flores arómaticas desprendidas de la primavera.
Las palabras ,algunas veces ,duelen,desgarran
otras,enaltecen,elevan,curan,despiertan sonrisas,
hacen brotar llanto,muchas veces de pena y otras de alegria.
Pero siguen siendo ellas...LAS PALABRAS,
las del poderío imponente,que se cobran insolentes
su trofeo;son ellas,disparadas al viento,quienes pueden
ayudar a levantarse o hundir una vida.